viernes, 25 de marzo de 2011

“A menudo la escuela enseña contenidos del siglo XIX, con profesores del siglo XX y alumnos del siglo XXI”.


Las operaciones de conservación, acceso y transmisión del conocimiento, están condenados a cambiar en breve, estamos obligados en este cambio y ser los protagonistas. La escuela del siglo XXI deberá ser un lugar excitante donde habite, el pensamiento y la reflexión. Los profesores deberán ser transmisores del conocimiento, capaces de razonar y justificar lo que enseñan y construir el conocimiento.

La incorporación de las TICs ( serias competidoras del papel tradicional de la escuela) agudizan y evidencian que la tarea de enseñar se está convirtiendo en un trabajo, cada vez mas complejo, incierto y difícil, para lo que se quedan cortos los formatos antes utilizados, por lo que se suele considerar una amenaza al papel tradicional de la escuela, provocando, rechazo, resistencia o resignación.

De todas maneras, alguien podrá pensar que pueda haber la certeza de que basta con introducir un nuevo medio para que se produzcan los cambios esperados.

La incorporación de las TICs, se producen frecuentemente, sin que medie una reflexión pedagógica de las posibilidades y limitaciones, que ofrece esta tecnología en la escuela, la construcción del conocimiento y el carácter que en ella se produce.

Es evidente que no podemos negar que las TICs forman parte de nuestra cultura, con los riesgos que conlleva, ya que a veces los consumimos de forma acrítica, intentan imponer formas de ser, maneras de actuar, en todos los aspectos de nuestra vida. Sea cual sea nuestra respuesta, no podemos negarnos, a la evidencia de que forma parte ya de nuestra cultura y contribuye a transformarla. Por ello la educación tiene un papel decisivo para poder participar o quedar fuera.

En la incorporación de las TICs en los centros educativos, no pongamos el énfasis en aspectos tales como el número de ordenadores, su ubicación, disposición o acceso a los mismos. Sino, mas bien en la trayectoria de su introducción en el flujo de la información, en quién los utiliza y para que los utiliza y de manera especial, en los cambios, en la organización de los centros educativos y el desenvolvimiento profesional de su profesorado

   
Las TICs contribuyeron a configurar nuestro mundo y continuarán haciéndolo, afrontarlos educativamente es un desafío ineludible.

Los sistemas educativos beberían preocuparse mas por promover la creatividad y la inventiva, en lugar de obsesionarse por imponer y gestionar hasta los mas mínimos detalles de un currículo uniforme, o entrar en un nivel de preocupación obsesiva por los resultados de los exámenes, la consecución de objetivos o establecimientos de baremos de rendición de cuentas, en lugar de prestar atención a la construcción de lazos emocionales de compromiso entre sus miembros y de estos con la comunidad. La búsqueda legítima de unos de unos estandartes educativos mas altos. “enseñar es una forma de ganarse la vida, pero, sobretodo es una forma de ganar la vida a otros”.

La revolución electrónica, ha de suponer un nuevo tipo de ciudadano con hábitos, intereses, formas de pensar y sentir emergentes. Una vida social presidida por los intercambios a distancia, por la supresión de las barreras temporales y la fronteras espaciales. A esta  nueva manera de establecer las relaciones sociales y sus intercambios informativos ha de corresponder un nuevo modelo de escuela. 


1 comentario:

  1. Es cierto que hay un nuevo camino,un nuevo modelo de escuela, pero es dificil estar seguro que se sabe caminar por él.

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